Habrá menos terneros en 2016

30.12.2015 09:14

Las inundaciones que afectaron a mediados de 2016 la zona de la Cuenca del Salado, en provincia de Buenos Aires, dejaron un saldo de menos animales.

Las inundaciones que afectaron a la Cuenca del Salado con mayor fuerza a mediados de agosto privaron a la región de tener 300.000 terneros más. Generaron, además, condiciones de anegamiento transitorio que afectaron nutricional y sanitariamente a los rodeos en plena época de parición. Se destacó la alta mortandad de vientres, partos mal logrados y mortandad de terneros por el exceso de lluvias e inundaciones.

Esta zona, tradicionalmente criadora, se encuentra en un proceso de transición hacia la actividad de ciclo completo, como una alternativa para diversificar la producción, por lo que la recría y la terminación de los terneros compite por la superficie que se destina a la cría

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El trabajo del INTA, que monitoreó la zona, se efectuó en los partidos de Ayacucho, Rauch, Magdalena, Punta Indio, Chascomús, General Belgrano, Lezama, Pila, Las Flores, Tapalqueé, 25 de Mayo y Saladillo.

Las condiciones de alta humedad, cambios bruscos de temperatura y la falta de forraje diferido para el período de parición hicieron que se presentaran con alta incidencia de casos de hipomagnesemia (bajo nivel de magnesio en la sangre de los vacunos).

Sin embargo, la parición se desarrolló con normalidad en los campos monitoreados, con un porcentaje de vientres paridos del 58,8% a la fecha del relevamiento, en la primera quincena de septiembre, consignó un trabajo elaborado por el INTA Cuenca del Salado, al que tuvo acceso este diario.

Esta caída de la producción impactará en los próximos meses porque productores dedicados a la cría y engordadores, entre los que se encuentran los feedlot, no tendrán suficientes terneros para atender la demanda de la reposición, por lo que se espera un aumento en el precio de esta categoría, que se hará más notorio a partir de febrero o marzo de 2016.

De acuerdo con datos que relevó CARBAP (Confederación de Asociaciones Rurales de Buenos Aires y La Pampa) remitidos por distintas sociedades rurales, oportunamente el fenómeno climático generó un menor porcentaje de vacas preñadas y menores pariciones, y también impactará en los destetes. Esas estimaciones indican la pérdida de 300.000 terneros, a los que hay que sumarle otra cifra similar perdida en 2014, también por la misma causa.

La Cuenca abarca 23 partidos de la provincia de Buenos Aires y cubre una superficie de 9 millones de hectáreas. Es considerada la principal “fábrica de terneros”: alberga el 17% de la ganadería total de la Argentina, estimada en casi 51,7 millones de cabezas.

La provincia de Buenos Aires tenía a fines de 2014 una población total cercana a los 17,5 millones de cabezas de ganado vacuno, incluido todas las categorías, de acuerdo a los datos publicados por el Ministerio de Agricultura de la Nación.

La región fue afectada por una inundación muy similar a la de este año, en 2014, con exceso de lluvia y encharcamiento de los potreros que “trajo aparejado mortandad de animales (vientres y terneros), sobre todo al sur del río Salado”.

Los técnicos a cargo del monitoreo indicaron que “se presentaron casos de mortandad de terneros y aborto por leptospirosis (una enfermedad producida por una bacteria que puede encontrarse en el agua o en la tierra después de una inundación)”.

“Después del exceso hídrico que afectó a una amplia zona de nuestra área de influencia se determinó la situación de la ganadería en la región, a través de un relevamiento de datos en establecimientos de cría bovina pertenecientes a grupos de Cambio Rural y CREA”, consignó el trabajo.

En el estudio se determinaron también los indicadores de porcentaje de preñez, estado corporal, mortalidad de vientres y parición. Sin embargo, en los establecimientos relevados se observó un buen estado corporal de los vientres, aunque algo inferior al año pasado.

También se detectó una alta proporción de vacas paridas temprano, que sumado a las buenas perspectivas climáticas que se produjeron en gran parte de la primavera, generó condiciones óptimas para lograr altos índices de preñez en el próximo servicio que será a comienzos del otoño.

El informe permitió determinar, además, el resultado de los destetes y estado corporal de los rodeos de cría de la región. Para su medición se estimaron las reservas de grasa de los bovinos mediante una valoración visual. Las vacas mostraron condiciones óptimas del estado corporal 3 o superior y un bajo porcentaje de vientres con estado menor a 3.

El porcentaje de preñez del tacto 2015 fue muy bueno, alcanzando el 89,2% en vacas adultas de rodeo general. Esta situación se debió al buen clima, templado y lluvioso durante el inicio del servicio 2014, que influyó para que los vientres presenten un alto nivel nutricional y buen estado para concretar un servicio exitoso. Pero la mortandad de vientres fue superior a la media histórica.

Por: Eduardo Bustos – Ambito Financiero